Lance Armstrong drogadicto, tramposo y bellaco ha desaparecido de la historia del ciclismo. La UCI ha decidido quitarle todos los Tours, siete, y limpiar este digno deporte.
Dicho esto se pueden establecer varios matices. Lance paso innumerables controles antidopaje en su época y en ninguno de ellos dio positivo, y si lo dio, se tapo, no por el bien del ciclismo y el deporte en general, sino por la cantidad de ingresos que estaba dando a la organización del Tour, con todo Estados Unidos, siguiendo a su ídolo por televisión.
Con lo cual, ni la organización del Tour ni la UCI, quedan muy bien paradas, por ambiciosas ambas y la segunda además por chapucera.
Sus compañeros Hincapie, Hamilton, este último el más activo en cuanto a declaraciones, tampoco son de los que te puedas fiar ni dejar las llaves de casa para que te rieguen las plantas. Salir después de más de una década con acusaciones hacia su jefe, el que por cierto les hizo ganar un buen montón de miles de dólares, diciendo que si esto que si lo otro, cuando ellos enfilaban el pelotón a 50 km/h, en más de una etapa, demuestra que se está muy resentido o se es extremadamente envidioso.
Así que dejemos de demonizar a Armstrong porque no hace mucho ensalzábamos a un compatriota, Contador, que también estuvo bajo sospecha de dopaje y todo el país clamaba por la honradez y limpieza de nuestro patrio campeón.
El deporte de elite ha dejado de ser deporte y convertirse en espectáculo y este requiere que las marcas, los records y los registros cada vez sean más al límite de lo humano. No seamos fariseos, si queremos todo esto estamos exigiendo a los deportistas esfuerzos extremos y eso llega un momento que fomenta el uso de la ciencia para que el cuerpo resista mayores y más grandes proezas. Así que lo uno sin lo otro, por mucho que lo queramos maquillar y a estas alturas de la película, no creo que pueda darse.
Y ya por ultimo decir que si un jugador de futbol juega infiltrado es un pedazo de campeón que se esfuerza por su club y sus colores al máximo. En la misma situación un ciclista que ayer se trago 180 km y hoy le esperan otros 200 con dos puertos de segunda categoría no podría hacer lo mismo porque daría positivo y entonces seria catalogado de drogadicto, tramposo y bellaco.
Amstrong es tan culpable como Contador, Landis, Pantani, Ulrich, Zulle, Hamilton, Basso, Valverde, Lepheimer o casi cualquiera que quedaba entre los 10 primeros.. Lo decía Pantani, que era inhumano la exigencia del tour, pero que la gente pedía espectáculo, puertos especiales más empinados, etapas más largas y "sprints" finales llenos de emoción, eso sí, a puro spaguetti y agua mineral. Acaban de asesinar al Ciclismo con esta medida que no es sino una CAZA DE BRUJAAS. Vamos, que USADA y UCI le tiró a matar al deportista más antipático y desagradable para el público en general, en el deporte más lleno de doping, en la época más tumultosa de este deporte.
ResponderEliminarexactamente eso la exigencia quien la mide? es facil culpar al protagonista del expectaculo, son todos dorgadictos al costo de desaparecer y parecer villanos tramposos y la organización donde esta?.
ResponderEliminaro son todos unos gorditos que van en coches y ni idea tienen de lo que es pedalear